Las mafias


Las mafias

por Antonio Emil Veres
“De jóvenes a jóvenes” del centro de salud Manuel Merino de Alcalá de Henares.
http://adolescentes.blogia.com

 

Las mafias son grupos de personas (delincuentes juveniles la mayoría) que se dedican a delinquir y hacer lo que quieren. El que más domine será el que les diga lo que tienen que hacer y todos los demás le seguirán sin poner ninguna pega. Por ejemplo, hay chicos de nuestra edad que les gusta delinquir y sembrar el caos porque así quieren.

Las personas que se meten en una mafia o banda no pueden salir así como así. Tienen que quedarse de por vida y ofrecer su vida para cualquier trabajo o pelea callejera.

Existen diferentes tipos de bandas. En general, a diferencia de los grupos, de unos siete o pocos más amigos, las bandas suelen componerse de veinte miembros en adelante. La banda cubre la falta de amor, sustento y protección de sus miembros.

Opino que son los padres quienes tienen la responsabilidad de la crianza de sus hijos, sea que lo hagan bien o mal. Ciertamente, ésta se inicia desde la concepción del bebe. Cuando esto se ignora, lógicamente es como jugar a la ruleta rusa. Se puede decir eso fácilmente, pero luego los padres no son los que nos impulsan a tomar drogas o a traficar con ellas. Todos decimos que esto pasa por la falta de atención de los padres a los hijos, pero ¡y todas las personas que si han tenido una buena educación y ahora son miembros o cabecillas de alguna mafia o banda! Definitivamente podemos decir muchas razones de por qué hay tanto vandalismo y tanta corrupción, pero todas esas razones son porque algunas personas deciden coger ese camino; no existe el bien sin el mal.

Creemos los adolescentes que si nos metemos en una banda de gente delincuente nos defenderán por ser de su banda, pero para que ellos nos defiendan nos pedirán que hagamos cosas como robar para ellos y más cosas. Cuando una persona entra en una banda esta sentenciada a quedarse de por vida, como ya he dicho, o salir difícilmente con heridas graves provocadas por sus antiguos compañeros.

Cuando unos jóvenes son de una mafia, culpan a la sociedad por la falta de alternativas. Al joven se le hace creer que él es la víctima, por ello usan el término de “Dame lo mío” o dicen: “Voy por lo mío”. Ellos cuidan su área de intrusos, así como de aquellos que pueden traerles problemas. La mayoría de estos jóvenes dudan que sus vidas tengan otras soluciones. A muchos les da vergüenza que sus compañeros los traten de débiles, no percatándose que cuando Dios desea rescatar a los suyos, lo logra. ¿Quién puede contra su voluntad? Nadie. No se necesita de una banda para sobrevivir los ataques del sistema. Las mafias necesitan de quien les haga los mandados, los trabajos de abajo y eso son las bandas, sin las bandas no puede existir mafia.